Al hablar de AUTOESTIMA y de GESTION EMOCIONAL tenemos frente dos pilares, más aún diría dos columnas que sostienen nuestras vidas y nuestras relaciones.
Es como si fuera una Galaxia donde las emociones podrían ser los soles que dan luz a las distintas áreas de nuestras vidas. Poder identificar las emociones que nos atraviesan es fundamental para aprender a gestionarlas. Nombrarlas en voz alta nos dará lugar a visualizarlas, ponerle caras, mirarlas de frente y buscar como me pueden ayudar para crecer como persona. Llamarlas por su nombre me permitirá saber cuáles son sus puntos fuertes y que parte de ellas debo dejar que sigan su camino.
Sentir determinadas emociones pueden resultarnos agradable o desagradable. Pero sin duda cada uno de ellas tienen una función que cumplir en nuestro crecimiento. Todas y cada están allí para enseñarnos algo. La dificultad que se presenta en algunas ocasiones es que hemos aprendido a conocerlas de acuerdo a las etiquetas que la sociedad le ha puesto como buenas o malas.
Debemos permitirnos conocerlas sin miedo, es verdad cada uno debe hacerlo en su tiempo. No podemos lanzarnos al vacío y enfrentarnos a todas ellas como super héroes. Cuando hacemos nuevos amigos vamos poco a poco conociéndolos, un día le preguntamos que le gusta comer, otro lo invitamos a pasear, en otra ocasión conocemos su familia. Lo mismo debemos hacer con las emociones.
Debes aprender a conocerte porque es allí donde comienza el proceso de AMAR – TE.
No sé en que peldaño de la escalera de la AUTOESTIMA te encuentres hoy. Pero te invito a comenzar este viaje universal e infinito del mundo EMOCIONAL.
Cuando comenzamos a interesarnos sobre el tema de las EMOCIONES no teníamos muy claro la diferencia entre los términos sentimientos y emociones. Nos parecían sinónimos y debemos confesar que al principio nos costó ver la diferencia entre ambos. Pero cada día que pasa nos damos cuenta la gran importancia que tiene poder diferencias ambos conceptos por la complejidad que cada uno conlleva.
Las emociones representan la esencia, es como si fueran el punto de partida o la puesta en marcha de un automóvil.
Nos basaremos en este concepto para hacernos entender y tratar de explicarte un poco mejor sus diferencias, pero a la vez su codependencia. Tu sabes que un auto tiene distintos componentes para poder funcionar lo mismo pasa con cada uno de nosotros. Tratemos de buscar una analogía. Generalmente nos explican que debemos tener en cuenta varios mecanismos para que el auto se ponga en marcha.
Para ello necesitas conocer que el acelerador te permite avanzar. Cuanto mas pises el acelerador más rápido iras. A mi me gusta ver el acelerador como la alegría. Cuanto más fomentamos la alegría mas avanzamos en nuestra vida. Pero como todo debe ser de forma adecuada no tan desbordante y continua que produzca algún choque.
Otro de los elementos importantes es el pedal de freno ya que este para o disminuye la velocidad el vehículo. La ira es la que permite poner límites detenernos y detener a otros en determinadas situaciones. Ahora si piso el freno cuando no es indicado puedo provocar un accidente. Por lo tanto debo saber cuando hacerlo y de manera.
Debemos mencionar el freno de mano algunas veces un poco desconocido. Pero me gusta relacionarlo con el miedo. Porque si tienes levantada esta palanca el auto no funciona. Y si de casualidad lo hace forzando la marcha puedes arruinar otros componentes del auto.
Debes bajar la palanca del freno de mano para seguir avanzando. Si bien detenerte ante el miedo puedo salvarte la vida. No puedes quedarte parado debes míralo de frente buscar sus puntos débiles y superarlo. Debes seguir avanzando el paisaje que te espera por delate vale la pena disfrutarlo.
Y ¿Qué podemos decir de la tristeza? A mí me hace pensar en las posiciones de la palanca de cambio. De acuerdo a la velocidad que necesita el auto tengo que ir moviéndola de posición o bien si es necesario volver hacia algún punto del camino debo mover la palanca marcha atrás. Puedo subir o bajar la velocidad dependerá del estado del camino.
Y no debemos olvidarnos de los limpiaparabrisas ellos nos permiten tener una mejor visibilidad los días de lluvia. Esto me hace pensar en la emoción del asco ya que me aleja de aquello que pone en riesgo mi vida. Como el limpiaparabrisas hace con la luna delantera y trasera las limpia para que no corra riego nuestra vida. Tu eres el conductor del auto y estas recorriendo un camino algunas veces mas llano otras con curvas y cuestas. Hay días que serán nublados, otros de sol con mucha visibilidad.
Pero solo tú tienes el control para que el auto de tu vida funciones y puedas manejar tus emociones transformándolas en sentimientos que te permitan disfrutar el viaje de tu vida.
En muchas ocasiones vienen a nuestra mente ideas que se transforman en proyectos. Proyectos mediante los cuales queremos cumplir objetivos para mejorar nuestro estilo de vida. Con el pasar de los días pueden ir apareciendo algunos obstáculos y asoma la su nariz el desánimo.
Algunas de las cosas que teníamos en mente comienzan a transformase en tareas difíciles. Las energías y el entusiasmo con el que habíamos iniciado comienza a decaer y si no reconducimos esa situación puedo que nos demos por vencido porque la motivación salió huyendo.
Pero podemos evitarlo si adoptamos la estrategia ME – MI -MO. Quizás te preguntes ¿y esto que es?. Veras que es algo muy simple de poner en práctica:
Te invito a que pongas en practica la estrategia ME – MI – MO porque tu mereces mimarte y ser FELIZ
La mediación es una palabra fácil de pronunciar, pero en algunas ocasiones difícil de llevar a la práctica.
Hace años cuando acepté el desafío de hacer un Master en Mediación y Resolución de Conflictos pude descubrir las diferentes formas de mirar las dificultades y las alternativas para poder superarlas.
Aprendí la importancia que tienen las palabras y sus formas de transmitirlas. Ellas son como las aguas de un rio. Pueden ser una melodía que nos trae paz, tranquilidad y serenidad. Pueden ayudarnos para tener una visión clara del paisaje que tenemos delante.
Pero también las palabras pueden ser como un salto de agua que ensordece a quien esta cerca. Su fuerza puede romper, arrancar aquello que encuentra en su camino. Pueden ser una fuerza muy destructiva. Por ello a través de las diferentes Habilidades Sociales podemos modelar el poder de las palabras.
Aprender a reconocer y poder manifestar con palabras nuestras emociones puede ayudar a detener la escalada de la rabia y que esta se transforme en un conflicto. Un conflicto que producirá un desequilibrio en todas las áreas de nuestra vida y en todas las relaciones en las que estamos inmersos.
La importancia de una Mediación exitosa en que todas las partes involucradas pueden ganar. Donde las necesidades de cada uno de los involucrados en la situación de conflicto se puedan satisfacer.
La mediación es un proceso de conocimiento, de crecimiento personal, de satisfacción y una oportunidad para un nuevo comienzo.
Desde el momento que abrimos nuestros ojos un torbellino de emociones que nos rodean.
Generalmente las percibimos en forma de sentimientos. Si son emociones o sentimientos agradables no nos representan mayores problemas. Pero no es así si emociones descargables como la tristeza o el miedo se instalan en nosotros. Es entonces cuando esto nos puede ocasionar dificultades. No porque no debemos sentir estas emociones sino por el protagonismo que le demos en nuestra vida.
Todas las emociones son útiles y necesarias la riqueza radica en como las gestionamos. Saber gestionarlas de forma adecuada es tener la llave para poder abrir los distintos cofres de experiencias que aparecen en el camino de la vida que recorremos cada día.
No estamos en esta vida para vivir en calvario de sufrimiento. Estamos para ser felices y procurar hacer felices a quienes caminan por la senda que estamos.
Debemos vivir las emociones desagradables, no vivirlas es imposible. Pero creo que tenemos el reto de mirarlas de frente y preguntarles: ¿Qué puedo aprender de ti? ¿Cómo me ayudaras a crecer? ¿Qué nuevos recursos me dejaras?
La tarea quizás no sea fácil, pero buscando orientación y acompañamiento en este proceso SEGURO saldrás enriquecido de cada experiencia.
Aunque no nos demos cuenta todos llevamos dentro un artista. Cada uno de nosotros tiene habilidades que enriquecen el mundo que nos rodea. Todos tenemos alguna habilidad que hace a alguien más feliz.
Hay personas que son muy pacientes para saber escuchar sin juzgar. Otras tienen una gran sabiduría para dar consejos.
Otras personas son muy serviciales y siempre están dispuestas a poner el hombre. Hay quienes escriben libros, textos especiales, te envían un mensaje o hacen una llamada cuando más se necesita. Todos llevamos dentro recursos para ayudar a otros y también para encontrar las propias soluciones.
La dificultad algunas veces puede radicar en que no sabemos todo el potencial que hay en nuestro interior y no optimizamos todos esos recursos que tenemos. Por ello es muy importante detenernos y mirar hacia nuestro interior. Realizar un inventario de todos esos recursos que tenemos. Debemos afilar nuestras hachas para derrumbar aquellos obstáculos que no nos permiten crecer y ser felices.
Que te parece si hacemos un alto y miramos todo aquello que tenemos para ser felices y quizás después de sacar algunas malezas encuentres más habilidades que hasta este momento estaban oculta para despejar tu camino hacia una vida mas feliz.